miércoles, 14 de abril de 2010

Tentación

-Te caes, te levantas. te vuelves a caer, pues te vuelves a levantar. ahora estás de pie, puede que camines sobre arenas movedizas o sobre un suelo lleno de cristales rotos, pero y qué? sigues de pie. sabes que hay muchas manos agarrándote con fuerza, atentos a cualquier mínimo descuido por tu parte. pero también sabes que hay momentos en los que sólo necesitas dos manos, e intentas convencerte a ti misma de que son esas, precisamente esas, las que ya no están. al menos no como tú las necesitas. duele, sí, y qué? acaso alguien te ha dicho alguna vez que en tu camino no encontrarías dolor? sabías de sobra que esto podría pasar. arriesgaste, muy bien, y esta vez no ganaste. todo riesgo, como bien dice el significado de esta palabra, implica la proximidad de un daño. también es cierto que si no arriesgas no ganas, pero eres tú, y solo tú, quien decide cuánto y hasta que punto eres capaz de arriesgar. seguirás pensando que no ha valido la pena, y las lágrimas no cesarán, pero nunca sabes que es lo que ocurrirá mañana.

No hay comentarios:

Publicar un comentario